Ligerz

El municipio lleva el nombre de un ciudadano romano llamado Ligerius y es uno de los más pequeños del Cantón de Berna.

Es un municipio idílico entre los viñedos y la orilla de lago de Biel y marca la frontera entre la parte alemana y la parte francesa del Cantón.

El clima relativamente suave, los viñedos y un ambiente muy tranquilo da un toque sureño al pueblo. Lo más llamativo es la iglesia del pequeño pueblo que por tamaño podría estar en cualquier gran urbe.Es la más grande de la región y el signo del pueblo.

En 1417 se permitió la construcción de una capilla propia para el pueblo y en 1482 en vez de una pequeña capilla construyeron una grande con reliquias traídos de Roma y una visita de 15 cardenales de Roma para su inauguración.

Por su situación geográfica y por la belleza es un tradicional destino para peregrinos y en ella se celebran muchísimas bodas.

Ligerz supo mantener el carácter de pueblo de vinicultores y pescadores y pequeñas empresas.
Su paisaje único junto con las casas medievales hace merecedora de una visita.

Recomendamos una visita en el museo del vino o asistir a las fiestas de la vendimia.