En un principio todos los perros, independientemente de su raza, pueden convertirse en perros truferos.
Algunas razas de perro son más adecuadas que otras pero no existe una raza definida para este tipo de actividad.
Tradicionalmente se recolecta la trufa con los perros de los pastores.
Ningún perro se convierte en un cazador de trufas de la noche a la mañana, es esencial empezar a aprender a cavar desde la más temprana edad del perro.
También necesitará tener una muy buena educación y complicidad entre el perro y su amo, el truficultor, pues será un factor determinante a la hora de buscar la Trufa Negra.
No se busca solamente que su sentido del olfato esté bien desarrollado, sino que también tenga una óptima condición física y sea obediente, no debe distraerse con facilidad, ser paciente y calmado, entre otras cosas.
Normalmente, las hembras dan mejores resultados que los machos, ya que su sentido del olfato está más desarrollado.
Las mejores razas de perros de trufa son:
Lagotto Romagnolo o perro de agua romano
tiene un sentido del olfato muy fino, fácil de adiestrar y suelen ser obedientes
sobre todo le caracteriza su carácter dócil y su complexión atlética.
tienen un sentido del olfato muy desarrollado al igual que su sentido de búsqueda
Al igual que el pastor alemán, será un buen acompañante en la búsqueda de Trufa Negra
deportivo y robusto, soportará las horas de búsqueda de trufas a través del bosque, incluso en temperaturas muy frías.
Además es un perro fiel y tranquilo, lo que facilitará su aprendizaje de esta actividad.