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Bocairent es un maravilloso municipio en el interior con un gran atractivo turístico y un valioso patrimonio histórico. Conserva en parte el modelo urbanístico islámico y las calzadas de la época árabe que hacen que adentrarse en su barrio medieval te transporte en el tiempo. Su casco antiguo está compuesto por estrechas y empinadas callejuelas, por eso recibe el sobrenombre de “El Laberinto Islámico” y ha sido declarado Conjunto Histórico Artístico.

Cuando hablamos de Bocairent, hablamos de «el pueblo donde las piedras hablan».

Los asentamientos humanos se remontan al Neolítico, pero fueron los íberos los primeros pobladores confirmados de la zona. Posteriormente llegaron los romanos y después los musulmanes, quienes aportaron el singular entramado urbano que ha llegado hasta nuestros días. El pueblo es un guiño permanente a lo rural y hace que uno se sienta de verdad lejos de lo urbano, cuando apenas ha recorrido una hora desde Valencia

Si quieres visitar Bocairent te damos algunas recomendaciones para aprovechar el tiempo en este precioso lugar.

Empezamos el recorrido desde la plaza del Ayuntamiento: ojo a las casonas altísimas, señoriales, estrechísimas , y atención a las casas colgantes que dan al barranco.

Cerca se ubica la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, el santuario católico más importante de la villa. Construida sobre el antiguo alcázar árabe y consagrada en 1516. A su lado discurre la calle Cantarerias, que más adelante desemboca en el Portal d’Agost y la Ermita Mare de Déu D’Agost.

Por el camino veremos antiguos pasadizos como la Calzada Excusada, único acceso de la antigua muralla que permanecía abierto por las noches. Así como un buen número de fuentes y la Cueva de “La Premsa”.

Muy pintoresca es también la calle de les Voltes, con un zig zag de escaleras rodeadas de macetas con coloridas flores. Desde aquí accederemos a la Plaza de San Vicente, un buen lugar para hacer un alto en el camino bajo la sombra de los árboles.

Muy cerca está el Museo de Oficios y Costumbres, y ya que hablamos de costumbres, es imprescindible visitar las ruinas de unas casas medievales. Es un conjunto de viviendas excavadas en la roca, también utilizadas para trabajos agrícolas, ganaderos y textiles y muestran cómo eran las viviendas al inicio de la industrialización. La febril época textil de la zona está en esas calles. Hay que destacar que Bocairent tiene el título de Real Fábrica de Paños. 

En los alrededores está la Ermita Mare de Déu dels Desamparats y un antiguo lavadero hoy en desuso.

También está el Museo Parroquial de Bocairent, con una de las mejores colecciones de arte sacro de la Comunidad Valenciana.

El Monasterio Rupestre aunque, por fuera pueda parecer el típico convento católico, en su interior guarda una de las grandes joyas arquitectónicas de Bocairente. Se trata de un monasterio subterráneo de 48 metros cuadrados, totalmente excavado en la roca.

Plaza de Toros 

De gran singularidad por estar totalmente excavada en la roca y “la más antigua de la Comunidad Valenciana”. Es un lugar muy particular, de pronto parece que estamos en un anfiteatro romano. La plaza se usa poco para corridas y mas para fiestas deportivas, culturales,

Puente de Darrere la Vila

El más antiguo del pueblo, por el que en su día se accedía a la ciudad. La panorámica desde allí de todo el barrio medieval es hermosísima. Desde aquí se obtiene la imagen más icónica de Bocairent, con el casco urbano extendiéndose por el cerro, la Iglesia de la Asunción como gran protagonista y el río Clariá discurriendo por el fondo del barranco.

Abandonamos el casco urbano a través de uno de sus laberintos. Desde uno de los miradores se ve la joya de la corona, Les Covetes dels Moros, un “monumento humano” oculto por la naturaleza. Fueron construidas alrededor del siglo X, pero no se sabe exactamente con qué objetivo, se habla de cámaras sepulcrales, cenobios visigóticos o graneros.

Por dentro están conectadas. Actualmente es posible visitar el interior, pero es necesario tener una buena condición física que nos permita subir el inclinado sendero de acceso, así como arrastrarse o trepar entre las diferentes cámaras. Desde fuera se ven unas 50 ventanas dispuestas irregularmente en una altura de 3 o 4 pisos, coincidiendo cada una de ellas en el interior una cámara.

La oferta turística se complementa con una serie de interesantes museos

Museo Arqueológico Municipal “Vicent Casanova”, su colección abarca desde el Paleolítico Superior hasta la Edad Media.

Museo Festero, dedicado a una de las fiestas más antiguas de Moros y Cristianos de la Comunidad Valenciana.

En los alrededores del pueblo están las huertas escalonadas, que siguen siendo una obra maestra de la agricultura (se trataba de ganarle la partida a la montaña, a la roca), en la antigua fábrica textil, tan célebre en la zona y en los saltos de agua, clave para que tuviera éxito la fábrica, para la prosperidad del lugar.