El Tró de bac, símbolo de la cultura fallera
Es un artilugio pirotécnico que se ha convertido en uno de los símbolos de la cultura fallera. No actúa con mecha sino por impacto, símbolo de la cultura fallera con más de un siglo de historia.
Apareció en los años 1902 y 1903 por primera vez, en unas cajitas muy especiales que escondían pequeños explosivos.
En las canteras de piedra, el maestro cantero tenía en su casa un pequeño laboratorio rudimentario, pero lo justo y necesario para hacer la pólvora con mayor o menor poder explosivo. Con el mortero y la maza elaboraba sus preparados. Para llegar a la mezcla perfecta para cada trabajo, el maestro tenía que hacer pruebas y había dos maneras
La primera y más segura era por medio de una mecha, con una especie de «tubos de ensayo» (morteretes) y realizar la prueba tantas veces necesario hasta lograr la composición deseada.
La segunda y menos segura, por medio de un golpe.
A la mezcla obtenida del mortero («la pólvora»), se le añadían pedazos pequeños de piedra de sílex, se envolvía con hojas de maíz, tela o papel, dándole forma y atando un pequeño paquete que se golpeaba con un mazo o barra para poder ver que la mezcla reunía las características óptimas.
Las mezclas sobrantes de las pruebas, de poca potencia, se daban a los más pequeños de la familia para que disfrutaran de los truenos lanzándolos contra el suelo. Así nació el petardo valenciano por excelencia.
Estuvo literalmente al borde de la desaparición en 2012 como consecuencia del endurecimiento de la normativa europea.
Además de un permiso especial para fabricar cada una de las unidades que salieran de la pirotecnia, la legislación restringía su uso exclusivamente a los mayores de 18 años que hubiesen superado un cursillo (el CRE).
Para cada pedido hay que solicitar un permiso al Ministerio para poder fabricarlo y justificar en qué actos se van a utilizar los artículos pirotécnicos.
No solo es vender pirotecnia y dispararla. Las empresas tienen que entregar el producto en ese preciso momento y dispararse por las personas acreditadas, los que tienen el curso CRE, y sólo pueden hacerlo en ese momento.
Dicho de otra forma, la «despertà» es un evento que hace la pirotecnia y que tiene como «empleados» del mismo a los falleros acreditados.
Y ojo, guardarse una caja para tirarla en otro momento puede llevar consigo una sanción enorme. No se puede almacenar y no se puede vender en tienda los tró de bac.
No obstante, en diferentes pueblos y, en concreto en el área de l’ horta valenciana, pero también en Alicante con sus hogueras y en las distintas fiestas para la celebración de los Santos Patronos de los pueblos, fueron utilizados mucho antes que en Valencia ciudad.
Imagenes German Caballero