Parque de osos de Berna
en el centro de la ciudad.
La relación de la ciudad de Berna con su animal heráldico tiene una tradición muy larga. El oso (llamado «Mutz» en Berna) tiene un alto valor simbólico y una gran importancia para la identidad cultural de toda la región.
Se le atribuye la fuerza, el orgullo, pero también la calma y la tranquilidad.
Después de la victoria en las batallas de Novara en 1513, los soldados trajeron consigo un oso vivo como trofeo y fue expuesto al público.
Desde entonces siempre había osos expuestos al público. El primer pozo de osos se encontraba en la Bärenplatz, que todavía se llama así hoy en día, hasta que se trasladó al Schanzengraben en 1764.
En 1857, el nuevo Bäregraben en el puente Nydegg fue inaugurado y más tarde ampliado con un segundo recinto.
Estos sitios son parte del patrimonio cultural de la UNESCO.
En 2009, se inauguró el nuevo Parque de los Osos directamente a orillas del río Aar.
El parque ofrece a los osos una pequeña arboleda, arbustos, hierba, cuevas y una gran piscina para nadar y bañarse. Los osos se pueden observar de cerca mientras escalan, pescan o juegan.
Los osos también disponen de sitios para retirarse si necesitan descansar.
Desde el otoño de 2015, un ascensor inclinado conecta la parte alta del complejo con las orillas del río y ofrece a las familias con cochecitos de niños o personas con movilidad reducida la oportunidad de visitar el parque sin obstáculos.
También se pueden reservar visitas guiadas, que ofrecen mucha información interesante sobre la historia del Parque del Oso y sobre los osos en general y permiten echar un vistazo detrás de escena.
