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La tierra prometida

 

Martina y Max Egolf, el matrimonio suizo que viajó en automóvil desde su país por todo el Languedoc y la Provenza francesa en busca de la Arcadia. Hasta que el destino los llevó a Almansa. El primer señuelo fue un vino del lugar, degustado en un restaurante en la misma ciudad. Con la digestión a medio hacer, comenzó la búsqueda de una pequeña finca en la zona. Sabían que habían encontrado su tierra prometida. 

Una finca de unas 60 has. con un caserón antiguo al lado mismo del ferrocarril en la árida Mancha, azotada por el viento, ahí, el sueño Martina y Max, de restaurar una finca vinícola abandonada y elaborar su propio vino, se hizo realidad. Los últimos kilómetros no están asfaltados. El vehículo se cubre de polvo. Estamos en una meseta a unos 800 metros de altitud, así se llega a Bodegas Ampelos, un viñedo único en la región.

Para elaborar su vino han plantado 9 has de Cabernet Sauvignon, Syrah, Merlot y, por supuesto, Garnacha negra, variedad con la que se sienten plenamente identificados, y que forma parte de su ideal de tinto. Han buscado un nombre mítico para su bodega, «Ampelos», cepa en griego clásico, pues según la mitología fue del corazón sangrante del amante de Dionisio de donde emergió la primera cepa. Su adaptación a la comarca ha sido tan completa, radical, que hoy parecen hijos del lugar. 

Son puristas, viticultores de la época “pre- enológica”, expresión de Max para designar los tiempos en los que no había estrellas de la enología, técnicas de almacenamiento, ni procesos técnicos de maduración. A ellos les gusta producir y apreciar el buen vino.

“Nuestro sueño era crear un viñedo de calidad. Nosotros no regamos las plantas de las viñas – como los otros viticultores de la región”. Las uvas son cosechadas y seleccionadas a mano antes de ser colocadas en un recipiente de metal.

“La fermentación espontánea se produce después de tres o cuatro días”, prosiguen. “No utilizamos levadura ni enzimas. Gracias al muy favorable clima que prevalece aquí, no hay prácticamente ninguna enfermedad en el viñedo y nuestras uvas están sanas”. 

“Vinos de calidad se hacen con uvas sanas, maduradas por la naturaleza, con tiempo y paciencia.”

La filosofía de Bodegas Ampelos es

  • El vino se hace en el viñedo.
  • La paciencia y el tiempo producen la madurez. 

El método de trabajo de Bodegas Ampelos

  • Viñas de secano.
  • Cultivo mecánico del suelo.
  • Tratamientos de plagas según agricultura ecológica.
  • Vendimia a mano.
  • Fermentación espontánea.
  • Ningún aditivo.
  • Crianza en roble francés.

 

Max procedía del mundo del teatro y Martina ha sido enfermera, pero en ese viaje iban acompañados por sus ilusiones, hasta el punto de convertirse en verdaderos «Aussteiger», palabra alemana que define más o menos a los que dan a su vida profesional y emocional un cambio radical de rumbo.