Cada año en la época invernal transcurre en la Albufera un fenómeno de la naturaleza.
Entre 60.000 y 80.000 aves acuáticas llegan en los meses de octubre y febrero del norte de Europa a la Albufera buscando calor y comida. Más de 500.000 mil aves solo hacen una parada de unos días en su viaje más al sur o a la vuelta para volver a su hábitat natural.
El invierno en el Parque Natural de L’ Albufera es cálido y además es el momento del año en el que los arrozales alcanzan su máximo nivel de inundación y abunda la comida.
Eso hace que este espacio protegido se transforme en un lugar privilegiado para las aves. Un espectáculo de la naturaleza de entrada libre a escasos kilómetros de Valencia.
La Albufera es un lugar único y maravilloso y tenemos que cuidarlo entre todos para conservarlo. Para nosotros, para nuestros hijos, para la flora y fauna que hay todo el año y para que las aves migratorias tengan un sitio para pasar el invierno. Que no pase lo que pasa en otros sitios.