Tribunal de las aguas Valencia

El tribunal de las aguas.

 

En la Puerta de los Apóstoles de la Catedral de Valencia actúa el Tribunal de las Aguas desarrollando un rito fervorosamente conservado a través de un milenio.

En él se imparte justicia a través de un proceso oral y en lengua valenciana cuyas resoluciones son inapelables.

El Tribunal de las Aguas es la única estructura legislativa que permanece de las establecidas por Jaime I. Los árabes practicaban ya este sistema de riego, que el monarca estableció formalmente, basado en la distribución del agua del Turia.

Lo forman ocho labradores que llevan aún su blusa negra típica de las gentes de la Huerta, los cuales son elegidos democráticamente cada dos años por los restantes regantes de la misma.

Sentados, en círculo, en sendos sillones de madera y cuero del siglo XVII, se les ve investidos de una senda autoridad. La estructura del riego, la participación de los labradores y la rapidez con que se resuelven los problemas, ha proyectado al Tribunal de las Aguas al ámbito internacional, considerándolo una institución modelo.

Sin ribete de folklore, eficaz y esencialmente valenciano, el Tribunal de las Aguas ejerce ante un público curioso en el que no faltan jóvenes universitarios y visitantes extranjeros.

Los jueves por la mañana si estáis paseando por el centro buscando “qué hacer o visitar” estáis de suerte.

 

En plena calle y a la luz de cientos de asistentes, cada jueves se reúne “El Tribunal de las Aguas” de Valencia.

 

Y es que “El Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia” es la más antigua institución de justicia existente en Europa y que fue perfeccionada desde los primeros momentos de la conquista del Reino de Valencia por el rey don Jaime I. En el año 1960, cumplió su milenario aniversario (960 – 1960).

Ha resistido el paso de todos los tiempos y ni la Constitución de 1978 ha restado jurisdicción a este tribunal.

Nuestro Estatuto de Autonomía, la Unesco y otros organismos de ámbito internacional, la valoran y tienen en gran consideración. Desde 2009 es declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Su función es regular, oralmente, el uso de los riegos de las “8 acequias de la huerta”. ¿Sabéis cuáles son? Pues las ocho acequias madre que toman agua del río Turia a través de sus azudes son, por el margen derecho, las de Quart, Benácher y Faitanar, Mislata-Chirivella, Favara y Rovella; y por el margen izquierdo, las de Tormos, Mestalla y Rascaña. Tan simple como distribuir el caudal existente desde la primera de las acequias, la de Quart; de esa manera, el agua llegará hasta la última de ellas y fertilizará los campos correspondientes sin verse perjudicada por su situación.

Hoy, las modificaciones ocasionadas por la construcción del nuevo cauce del río Turia con la “Solución Sur” han hecho variar el sistema de azudes con la aparición del Azud del Repartiment (‘La Cassola’) del que toman aguas las acequias de Rascanya, Robella y Favara, además de la acequia del Oro.

 

SESIONES: Se reúne en la puerta de los apóstoles de la Catedral de Valencia, junto a la plaza de la Virgen, todos los jueves del año, a las 12.00 horas (haya litigios o no).

Si llueve se reúnen en la “Casa Vestuario”.

 

EXCEPCIONES:

– Jueves festivos.- Se reúne los miércoles.

– 2 jueves, entre el 25 de diciembre y el 6 de enero.